Cuidado, el sol aún deslumbra y la arena rezuma por tu poros desnudos.
Quiero tocarte, quiero soñar despierto que esto no es un sueño.
Solo traemos una toalla.
Habrá que compartirla.
Y ya siento la metamorfosis en mi cuerpo...
Ella divaga con su mirada el paisaje místico.
El destino me llamó a bajarle las bragas,
mientras acariciaba sus pezones a escondidas.
Como garrotes de una prisión a oscuras
se transformaron sus pechos para engatusarme
en un callejón sin salida pero con varias entradas...
Elegí una. Su boca.
Su lengua. Sus babas.
Mil miradas penetrantes nos miraban en aquella playa y en aquella hora...
pero no eran más que ojos naturales, a veces irracionales, como el aire y las olas.
Y dibujé en el aire un corazón con mis dedos.
Y grité a las olas mi amor por tus huesos.
Llegó la hora de penetrar, de fusionar dos cosmos ardiendo.
Absorto ante tu clítoris mi polla se abalanza como cual imán enganchado.
Se hace de noche pero no paramos.
Las estrellas nos piden una tregua,
quieren comprar palomitas
para ver esta puesta en escena.
Los temblores del orgasmo sacuden violentamente la arena levantando una ligera polvareda.
El mar nos acecha con sus olas, quiere enjuagarse con nuestro semen, nuestros sudores incandescentes.
Quiero tocarte, quiero soñar despierto que esto no es un sueño.
Solo traemos una toalla.
Habrá que compartirla.
Y ya siento la metamorfosis en mi cuerpo...
Ella divaga con su mirada el paisaje místico.
El destino me llamó a bajarle las bragas,
mientras acariciaba sus pezones a escondidas.
Como garrotes de una prisión a oscuras
se transformaron sus pechos para engatusarme
en un callejón sin salida pero con varias entradas...
Elegí una. Su boca.
Su lengua. Sus babas.
Mil miradas penetrantes nos miraban en aquella playa y en aquella hora...
pero no eran más que ojos naturales, a veces irracionales, como el aire y las olas.
Y dibujé en el aire un corazón con mis dedos.
Y grité a las olas mi amor por tus huesos.
Llegó la hora de penetrar, de fusionar dos cosmos ardiendo.
Absorto ante tu clítoris mi polla se abalanza como cual imán enganchado.
Se hace de noche pero no paramos.
Las estrellas nos piden una tregua,
quieren comprar palomitas
para ver esta puesta en escena.
Los temblores del orgasmo sacuden violentamente la arena levantando una ligera polvareda.
El mar nos acecha con sus olas, quiere enjuagarse con nuestro semen, nuestros sudores incandescentes.
7 comentarios:
Espero que os guste.
Saludos y abrazosss
Por un momento he llegado a pensar que habias escrito un comentario romántico pero no! lo has convertido en erótico jeje
Me ha gustado ^-^ , aunque lo hubiera preferido sin ser tan "explícito", más romántico como he dicho al principio... :P
Pa! :P
¿Cuando voy a poder entrar en este blog sin que caiga una manola? xD
Me gusta tu forma de escribir (creo que ya te lo dije alguna otra vez), asique sigue así socio ;)
JUAS! Se hacen manolas con tu blog? jajajajajajajaja yo me parto!!!!
Oye que muy bonito el relato eing... pero... estoy de acuerdo con pa! si escondes algunas palabras disfrazadas en otras más... como te diria yo... más que no expliquen tanto!! Me comprendes? jaajaajaajja porque no me comprendo ni yo!!! En fin, pon kleenex en la puerta antes de entrar porque si no te van a dejar tu rinconcito echo un akjooooooo
;-P!!
Por cierto antes de irme... esto de:
Elegí una. Su boca.
Su lengua. Sus babas.
Te ha quedado muy romantico jajajjaajajaja ;-)
Un besoteeeeeeeeee monigote!!!
Muuuuuuuuuuuuuuám
"Se hace de noche pero no paramos.
Las estrellas nos piden una tregua,
quieren comprar palomitas"
Me ha encantado.
Gracias a todos por comentar, me alegro "caramelos" que te haya gustado xD
Pa! y Luni, sí, os entiendo ;)
Espero que el siguiente os guste un poquito más jeje.
Abrazos y besos
Está muy bien!!
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